Proyecto Hombre II

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4 comentarios:

Tyler Durden dijo...

DIARIO DE MI PRIMER CORTOMETRAJE

Orígenes: Un amigo y yo nos apuntamos a un curso de iniciación audiovisual en nuestra ciudad. Como proyecto final, nos mandaron realizar un pequeño cortometraje. Expuse una idea que, fue tan malinterpretada que decidí dejarla. Al final mi amigo propuso otra, que podría resumirse en las angustias nocturnas de un individuo encerrado en un cajero acosado desde el exterior por dos presencias extrañas. Problema 1: las cámaras son buenas, pero no tanto como para grabar bien de noche. Problema 2: ni de coña van a darnos permisos para rodar en un cajero, por mucho que el curso esté patrocinado por Ibercaja. Estamos apunto de abandonar el proyecto pero al final lo transformamos en las angustias diurnas de un individuo encerrado en su propio coche acosado desde el exterior por dos presencias extrañas. A pesar de los intentos del grupo de ir transformando la idea en un ejercicio de terror, mi amigo y yo conseguimos mantener el tono patético y humorístico que siempre tuvimos en mente para la historia.

Preparativos: Tras mucho cavilar, decidimos rodar en unos caminos cercanos a la carretera del aeropuerto, muy cerca de Proyecto Hombre. Decidimos titular al corto Proyecto Hombre II. Pensamos que dos días nos bastarán para rodarlo todo, pero nuestro profesor (muy sabiamente) nos recomienda un mínimo de 3. Tras el baile de días y horarios elegimos el que mejor nos viene a todos, pero desde este punto al rodaje se desvincularán 3 compañeros, quedando al final sólo 4 (más los dos actores invitados). Intentamos conseguir todo el atrezzo necesario: sangre artificial, vísceras, una furgoneta, material de hospital, una escalera, vómito... resulta difícil tenerlo todo bien atado. Otro problema del que no hablaré por no extenderme fue la decisión de qué música incluir en el cortometraje, que a día de hoy todavía no sabemos por culpa de los putos derechos y esas cosas.

Día 1 de rodaje: El primer día acudimos al sitio y la cosa está nublada, tal como queríamos para darle un aspecto más tétrico. Por suerte un día antes el profesor había explicado a mis compañeros cómo encender la cámara y esas cosas, porque a pesar del curso no sé si me hubiera acordado. Grabamos cerca de Proyecto Hombre, hacemos mil planos detalle, rodamos paisaje y las primeras tomas del corto, todo parece ir bien pero de repente sale el sol y nos jode toda la iluminación. además cada dos por tres aparecen coches jodiendo las tomas, llega un pastor con ovejas y se nos planta media hora en mitad del campo y vienen a preguntarnos qué estamos haciendo. Pero lo peor es al llegar la tarde, cuando introducimos todo lo grabado en el ordenador y al intentar hilar lo grabado, pese a haber seguido más o menos un esbozo de storyboard, las cosas no casan, se ve nuestra silueta en la mitad de los planos detalle y aparece el reflejo del micrófono en los cristales del coche más de una vez... con una sensación agridulce esperamos al día siguiente, que va a ser el fuerte porque pensamos rodar prácticamente todo lo que nos queda...

Continúa en el siguiente comentario...

Tyler Durden dijo...

Día 2 (y -de momento- último) de rodaje, conocido como "el apocalipsis": creo que las cosas no podrían haber ido peor este día. Llegamos a las 9 de la mañana y está lloviendo; además, hace un viento de mil pares de cojones y las temperaturas rondan el bajo cero. Pero hemos venido todos (incluso el profe nos ha acompañado) y decidimos esperar a ver si para. Para, pero se mantiene el frío y el viento. Además, el protagonista y además custodio de la cámara se ha dormido, y acude a las once. A las once y media empezamos, y nos hecha una mano el profesor, aunque nos advierte que con este viento igual se jode todo el audio. Vestimos a los dos actores que hacen de seres extraños con batas de hospital y, a pesar del frío, no se nos quejan. El profesor repite cada toma una y otra vez, a mí me parece excesivo; además, entre esto y que ya habíamos empezado tarde (y que llegó la furgoneta conducida por la madre de uno de nosotros 4 con tortillas de patata y cafés y paramos a comer en plan picnic) se nos hacen las mil, así que el profesor tiene que irse a mitad del rodaje. La gente empieza a estar cansada y los de la bata tiritan más de lo normal. Grabamos todas las escenas de la furgoneta un poco más rápido, para no tener que llevarla el viernes, me subo a la escalera con la cámara y aquello tiembla tanto que pienso en lo patético que sería caer y morir en ese momento. Al final un chico de bata dice que no puede más y, al mirarlo, nos damos cuenta de que parece un cadáver. Además el protagonista también está deseando irse. Quedamos todos en terminarlo el viernes porque la semana siguiente nadie tiene fiesta y ya sería un caos terminar Proyecto Hombre II.
Por la tarde todo se cae al meter lo grabado en el ordenador. Empezamos crecidos al ver las tomas del profesor; para mi sorpresa, no sobra ni una de esas tomas que creía que repetía tanto; además, juega con los encuadres y los enfoques de una forma que parece que nos puede salir algo realmente bueno, pero, ¡ay! después llegamos a nuestras tomas. Intentamos montarlas creando cierta continuidad pero aquello es un caos, no hay color con las anteriores; hay tomas mucho más oscuras que otras, otras están desenfocadas, y, por supuesto, todo el audio está jodido por culpa del maldito viento. Siento que haría falta quemar todo lo hecho y empezarlo todo, pero me callo. Nos vamos para casa esperando terminar como sea el viernes, montar y que sea lo que dios quiera, que para eso es nuestro primer corto.

¿Fin?: esa misma noche telefonea el chico de la bata, dice que no nos preocupemos, pero que lleva toda la noche vomitando. Se cancela el rodaje. Al día siguiente, el protagonista dice que va a cortarse el pelo. Alucino. Se habla de dejarlo para enero pero yo ya les digo que tengo exámenes, que hasta marzo nada. Mientras escribo, tanto yo como mi amigo aún no hemos aparecido por el Zentrum para coger lo grabado e intentar montarlo en casa... estamos demasiado chafados. No sabemos si se terminará pero hemos aprendido que esto del cine no es nada fácil por mucho cine que hayas visto y por mucho que te hayan explicado los aspectos técnicos y por muy buena idea que tengas en mente y por muy preparado que llegues al rodaje. De repente admiro mucho más al Coppola de Apocalipse Now. Me pongo Condemor y me parece un montaje bueno, los planos se concatenan con fluidez, hay juegos de zoom, todo fluye... y estoy viendo una película cutre de cojones. ¿Es consciente la gente de lo difícil que es todo esto?

Pese a todo, estoy totalmente convencido, termine o no Proyecto Hombre II, que esta vez no va a ser la única que me complique la vida y salga a grabar algo con un amigo. Es lo que tiene el cine o la literatura, se hacen por pasión, por obsesión, no porque te hagan pasarlo bien (al menos, en mi caso -aunque en el caso de la literatura es un poco diferente, porque muchas veces me ha servido de alivio... frente a la frustración que me ha supuesto mi primera incursión en el audiovisual-).

spleen dijo...

Jajajaja, así que hacer cine no es tan fácil como parece...
Me he partido con eso de que tú sólo querías hacer una toma de cada cosa; se me ha venido a la cabeza esa escena de Ed Wood cuando le pregunta uno del equipo: "¿Pero no vas a repetir la toma?". Y él: "¿Para qué? ¡A positivar!".
Me imagino que ahora Garci te debe parecer un genio incomprendido... :D

Tyler Durden dijo...

Hombre, ¡tampoco nos pasemos con lo de Garci!

Jaja pues te juro que me vino a la cabeza esa escena de la peli de Burton; por desgracia, llegó cuando ya estaba frente al ordenador, contemplando la tragedia...

Menuda locura... aunque no te lo creas, me dejé varias catástrofes más en el tintero a la hora de escribir el texto...