Lo mejor del año 2013

TOP PELÍCULAS (por orden alfabético):

- THE ACT OF KILLING (entrada en La Bobina, aquí).

- ANTES DEL ANOCHECER.

- LA GRAN BELLEZA.

- PARAÍSO: AMOR (entrada en La Bobina, aquí).

- LA VIDA DE ADÈLE (entrada en La Bobina, aquí).

Menciones especiales y guilty pleasures:

PRISIONEROS (sólo le faltaba ser más Zodiac), GRAVITY (sólo le sobraba Sandra Bullock -like always- y un cierto gusto por la pirueta y el más difícil todavía), MUD (innecesario epílogo y ausencia de la potencia y la garra de Take Shelter), CRUCE DE CAMINOS (demasiado Bradley Cooper), LA MEJOR OFERTA (se toma muy en serio a sí misma), STOKER (Park Chan-wook puede hacerlo -ya lo ha hecho antes- mucho mejor), o marcianadas que me dejaron con la boca abierta de la talla de HK FORBIDDEN SUPERHERO, sobre un superhéroe asiático que se viste de mujer y restriega su paquete contra los enemigos (sic) o DOLOR Y DINERO. Todavía me pregunto cómo me ha podido gustar tanto un film de Michael Bay. Es una Spring Breakers con sentido del humor (negro). Y en cierto modo mucho más marciana. OJO: ¡narra hechos reales!
Respecto a las películas del podio, he dejado un hueco por respeto a las películas que aún no he visto y que podrían tener posibilidades (por ejemplo, To the Wonder, Borgman, Frances Ha, Her, La gran estafa americana y, especialmente, Nymphomaniac). Tampoco he considerado de este año otros films más o menos estimables como LOOPER (la vi en la temporada de Sitges el año pasado), LA CAZA (notable) o THE MASTER (hipnótica y notable).
 ¿Es LA VIDA DE ADÈLE tan tan buena como van diciendo por ahí? NO. Pero es una película sobresaliente, arriesgada en alguna de sus escenas de cama (que rozan la pornografía, algo que no es nuevo -Nine Songs o Romance X no la rozaban, la abrazaban- pero no por ello deja de ser interesante), unas escenas nada gratuitas por otra parte, y que cuenta una bella historia de amor de forma dura y realista. Cuando disfrutas viendo una historia entre personas con las que no compartes nada en común es que estás viendo una muy buena película.
Y seguimos subiendo: ANTES DEL ANOCHECER fue el broche perfecto de una trilogía perfecta (aunque todos esperamos que no sea el broche, la verdad). Donde en la primera se nos contó lo que podría ser, y en la segunda lo que pudo, en esta vemos lo que fue. Y eso nunca es tan bonito, pero sí más real e intenso. Cuando la cámara se aleja dejando a la pareja atrás, tú sólo quieres quedarte allí un rato más.
 Y LA GRAN BELLEZA. La gran belleza es algo así como Spring Breakers bien hecha. Muy bien hecha. Habla de lo mismo pero crea algo. Mientras las dos hablan del sinsentido de la vida, La gran belleza nos presenta la posibilidad del juego. El último agarradero al que aferrarse mientras vemos cómo Spring Breakers se despeña por el acantilado. Y mientras nos habla de la imposibilidad de "una gran belleza", nos muestra belleza, aunque no sea la "grande"; pero sí es mucha. Y habla de cosas que te traspasan, y la cámara no te agita, te transporta. Quizá sea la distancia que separa a un joven nihilista imbécil de un hombre maduro, culto e inteligente nihilista. Pero qué quieren que les diga: que la vida no parezca tener sentido no veo por qué tiene que implicar que además tengamos que ser imbéciles.
 Tras el amor pasamos por el hastío, acabando en el horror. El horror de THE ACT OF KILLING, un documental inclasificable, incómodo, y necesario. Me pilló por sorpresa y sin expectativas, y me pilló pero bien. Y otro tipo de horror, alejado del horror de la sangre y la muerte, es el horror cotidiano, reflejado a la perfección Ulrich Seidl en su trilogía PARAÍSO, de la que destacaría (por ser la primera que vi, quizá el impacto que me produjo fue mayor) AMOR. Amor trata sobre una maduritas en su periplo de turisteo sexual por el tercer mundo. No un solo plano de esta película que no sea sórdido o grotesco. Va directa a la mandíbula de tal forma que entiendo que algunos digan de Seidl que Haneke es un corderito a su lado. Quizá Hanake sea más cerebral y Seidl se centre en el estómago, no sé. Quizá mi desconocimiento hacia él fuera la causa del impacto y mi sorpresa. No lo sé. Pero esta es una de las películas que más me han gustado, películas que hablan de la vida, o más bien de los límites de ella. De lo mejor (el amor -¡pero no el de Seidl!-) y lo peor (ahora sí, el de Seidl) que hay en nosotros.


TOP DECEPCIONES:

- SPRING BREAKERS: arrasa en cuanto a lo peor del año. Es una película que, encima, despierta mis simpatías respecto a lo que quiere contar (La gran belleza habla de lo mismo, si lo pensamos un poco, y ésta sí es una de mis películas favoritas del año), pero me asquea y me repugna por cómo lo cuenta. Aburrida, sin gracia, un videoclip MTV nihilista que dura lo que un film grabado por alguien que parece estar echando un grito justo antes de suicidarse.

- SÓLO DIOS PERDONA: Cada vez que un crítico la incluye en su "lo mejor del año" dejo de leer su lista. Un precioso celofán que envuelve a la nada más absoluta.

- THE LORDS OF SALEM: Rob Zombie se mete un tripi y se cree Kubrick. Es curioso como el terror de este año ha basculado entre lo más experimental (The Lords of Salem) y lo más clásico (Expediente Warren). Si digo que Expediente Warren me parece la mejor película de terror del año (aunque me gustó más Insidious -no considero, como algunos por ahí, que La cabaña en el bosque sea del 2013-) creo que queda claro por dónde van mis gustos. Y ojo: el que escribe tiene en su top five de mejores películas que ha visto en su vida films como Persona o Arrebato. ME ENCANTA lo onírico y lo experimental, y creo que con ello el cine alcanza sus cotas más altas, pero detesto profundamente las tomaduras de pelo.

- EL HOBBIT: parece un videojuego donde el más difícil todavía es la única opción. Las heridas no sangran, la muerte sólo afecta a un bando y se puede vivir un peligro de muerte al minuto y salir indemne en todas las ocasiones con relativa facilidad (me sorprende tanto lo poco que me ha gustado, que he llegado a preguntarme si realmente la trilogía cinematográfica de el Hobbit es una mierda que no conserva nada de lo estimable en El señor de los anillos o sólo me estoy haciendo viejo).

- THE HOST: definitivamente, Stephenie Meyer debe tener alguna psicopatología sexual...

Menciones especiales al AMOR de Haneke y a PACIFIC RIM (supongo que si siguiera soñando con G.I. Joes me habría gustado más; pero creo que el hecho de que una película de bichos no se tome en serio, vaya al grano y sea desprejuiciada no la convierte automáticamente en una buena película).